EL OTOÑO

  

       El otoño es una de mis épocas año favorito, su olor a tierra mojada, sus días grises, al cambio de tonalidad de las hojas de los árboles. Es la época del año más visual después de un verano soleado y caluroso.

 Además nos anima a explorar más nuestro entorno, los paseos por el bosque con chubasquero y botas, adentrándonos en un paisaje lleno de marrones, rojos y amarillos, los olores, y sobre todo donde podemos encontrar caracoles, gusanos, musgo, variedad de hojas,…

¿No os apetece salir a explorar? Seguro que pasáis un rato estupendo donde podéis recoger variedad de elementos con ellos para después en casa manipularlos y disfrutar de una actividad sensorial que os lleve a recordar ese paseo.

Nosotros desde la Escuela, hemos paseado por el patio, viendo los madroños, el membrillo, recogimos algunas hojas…

En el aula, con vuestra ayuda más lo que encontramos en nuestra búsqueda por el patio, también estuvimos explorando y manipulando algunos elementos propios del otoño, las piñas, calabazas, manzanas, uvas, naranjas, mandarinas…

Algunos fueron una sorpresa de sabor, la granada apenas la habían probado la mayoría, y su color rojizo se quedaba impregnado en el papel, los calcetines…

Con las piñas pasaba igual, su curiosidad llego a que las abrieran sacando los piñones, y cuando no lo conseguían, las tiraban al suelo, golpeándolas con fuerza para luego buscar los piñones caídos.

Las mandarinas, en cambio, solo la exploraron con las manos, olfativamente es un fruto que llama la atención, pero el sabor, no a todos les gustó y sus gestos lo decían todo. Pero lo pasamos genial intentando pelarlas solos.

    Finalizamos con la fiesta del Otoño, donde unimos las hojas y los frutos, todo junto en el aula. Pisar las hojas secas, ver como se mueven por el viento cuando abrimos la ventana, incluso romperlas en trocitos usando la pinza a tamaños minúsculos.

       Durante estos ratitos de exploración, nos acompañaba suavemente Vivaldi con la estación del Otoño, el tono era suave, para no perdernos ninguna de las sensaciones que el ambiente ofrecía.

    Lo pasamos genial, estuvieron muy tranquilos, observadores y expectantes ante lo que tenían a su alrededor.

Si os animáis a dar un paseo por el bosque, no dudéis en contarme vuestra experiencia. Me encantara leeros. Y si os apetece traernos una foto al aula, tenemos un rinconcito que seguro ellos disfrutaran viéndose.